
El Agua Dorada contiene ciertos minerales que le proporcionan un color cálido cuando recibe el sol al ocaso, de ahí su nombre original aunque las gentes de Faerûn asocian ese nombre a la pasión local por el comercio y el oro.
Un pulpo gigante dotado de conciencia por un druida elfo acuático de una ciudad submarina cercana ha creado una pequeña patrulla de tiburones entrenados para atacar a los recolectores de coral.
La vida en las Tierras Radiantes es sorprendentemente libre, sin ninguna de las interferencias con mano dura de las estructuras de poder, aunque siguen el código de Adama, que es al mismo tiempo una creencia religiosa y un modo de vida, muy ligado al comercio. El estilo de vida de mercader o trabajador medio es en muchos aspectos prolífica y tranquila, pero la vida en las altas esferas está muy marcada por la política.
Los aventureros están muy bien considerados en las tierras bañadas por el Gran Mar, unas veces como guardaespaldas de mercaderes importantes que viajan a las Tierras Centrales y otras como potenciales portadores de objetos maravillosos de otros lugares, con los que pueden comerciar. La excepción a esto es Véldorn, ya que los jefes de las bestias de estas tierras tienen a los aventureros en la más baja estima.
Para más información consultar El Sur Radiante.
No hay comentarios:
Publicar un comentario